La gerente regional de Salud, Kerstyn Morote, calificó de buena la propuesta del Ministerio de Salud (Minsa) de evaluar el retorno de la obligatoriedad del uso de mascarillas en lugares abiertos, a fin de evitar o frenar la propagación del virus del covid-19 en el territorio nacional.

La funcionaria comentó que desde antes que se levantara la restricción muchas personas ya no usaban el cubreboca, comportamiento que influye en los índices de casos positivos y en una posible quinta ola.

“Es importante que cada uno decida sobre si ponernos la mascarilla donde sabemos que corremos riesgo de contagiarnos, no llevar a nuestros hijos a lugares donde hay aglomeración, y acudir a los centros de salud más cercanos para vacunarnos”, indicó.

Morote lamentó que el proceso de vacunación se haya estancado un poco, pues del millón 300,000 liberteños que han sido inoculados con la tercera dosis, solo 320,000 han recibido la cuarta dosis.

“Dónde están ese casi un millón de liberteños que han recibido la tercera dosis. Dependemos de ellos para que esta situación se revierta. Ahora que los casos han bajado y no hay colas extensas es el momento de vacunarnos y completar nuestro esquema de vacunación en toda la familia”, apuntó.

Respecto al índice de contagios, la gerente de Salud afirmó que hace dos semanas el promedio era de 8 contagios diarios, pero la última semana subió a 16, por lo que espera que esta semana se mantenga o disminuya el número.

Respecto a la quinta ola, mencionó que todas las proyecciones apuntan a que empezaría en diciembre por ello ratificó la importancia del buen comportamiento que tenga la población, sobre todo en las fiestas de fin de año.