El papa León XIV ve "urgente" que en la iglesia arraigue "una cultura de la prevención que no tolere" los abusos, según ha escrito en un mensaje a la periodista que denunció en Perú al grupo del Sodalicio hasta su disolución.

"Quiero agradecer a quienes han perseverado en esta causa, incluso cuando fueron ignorados, descalificados o incluso perseguidos judicialmente", señala el pontífice en la misiva, publicada por 'IDL Reporteros' y divulgada también por los medios de la Santa Sede.

El mensaje está dirigido al estreno de una obra en Perú en la que se narra la batalla de periodista Paola Ugaz y otros compañeros al denunciar los abusos del grupo apostólico Sodalicio de Vida Cristiana, disuelta por orden del papa Francisco por sus abusos.

León XIV, que pasó gran parte de su vida como misionero en varios puntos de Perú, defendió los esfuerzos de su predecesor en la lucha contra los abusos y aseguró que "esa conversión no es retórica sino un camino concreto de humildad, verdad y reparación".

"La prevención y el cuidado no son una estrategia pastoral: son el corazón del Evangelio. Es urgente arraigar en toda la Iglesia una cultura de la prevención que no tolere ninguna forma de abuso —ni de poder o de autoridad, ni de conciencia o espiritual, ni sexual", apostó.

Esa nueva cultura, subrayó, "solo será auténtica si nace de una vigilancia activa, de procesos transparentes y de una escucha sincera a los que han sido heridos".

El pontífice aseveró que, para esta misión, la iglesia necesita a los periodistas y, por ello, realizó un llamamiento por la libertad de prensa, especialmente en el país andino.

"Hoy, vuelvo a elevar la voz con preocupación y esperanza al mirar hacia mi amado pueblo del Perú. En este tiempo de profundas tensiones institucionales y sociales, defender el periodismo libre y ético no es solo un acto de justicia, sino un deber de todos aquellos que anhelan una democracia sólida y participativa", dijo.

Y emplazó a las autoridades peruanas, a la sociedad civil y a cada ciudadano a "proteger a quienes, desde las radios comunitarias hasta los grandes medios, desde las zonas rurales hasta la capital, informan con integridad y coraje".

"Donde se silencia a un periodista se debilita el alma democrática de un país. La libertad de prensa es un bien común irrenunciable. Los que ejercen esta vocación con conciencia no pueden ver apagada su voz por intereses mezquinos o por miedo a la verdad", advirtió.

Y agregó: "A todos los comunicadores peruanos me atrevo a decirles con afecto pastoral: no teman. Con su trabajo pueden ser artífices de paz, unidad y diálogo social. Sean sembradores de luz en medio de las sombras". EFE